En esta carta
quisiera comentar, dada la actualidad y dada la importancia y la gravedad del
mensaje, las palabras que el papa Francisco dijo a los jóvenes, el pasado 25 de
marzo, en el estadio milanés de San Siro. Estadio que estaba abarrotado, hasta
la bandera, de entusiastas adolescentes.
El Santo Padre,
con la vivacidad que le caracteriza y con su profunda sensibilidad, dialoga con
ellos; y los
invita a colaborar para poder recibir una adecuada educación en valores; y los
invita también a que prometan a Jesús, que nunca harán bullying.
El Papa llama acertadamente: “Fenómeno feo” al bullyng.
·
“Cuando algunos se burlan de alguien, les gusta hacer
pasar vergüenza o pegarles, esto se llama bullying”.
El papa
Francisco, a los miles de jóvenes reunidos, les pidió además que con el
sacramento de la confirmación hagan la promesa de que no se permita nunca eso,
ni en el colegio, ni en la parroquia, ni en ningún lado y les dijo:
·
“Prométanme, nunca burlarse de un compañero”:
¿Me lo prometen?
Al responder a
las mamás y a los catequistas sobre la educación de los hijos, el Papa precisó
que es necesario una educación basada sobre: el pensar, el sentir y el hacer;
con el intelecto, con el corazón y con las manos.
Para que de
esta manera los jóvenes puedan:
·
Pensar lo que sienten y hacen.
Sentir lo que piensan y hacen.
Y hacer lo que piensan y sienten.
Y subrayó:
·
“Dar nociones intelectuales sin corazón y sin las manos
no sirve. Nunca educar solamente con ideas o nociones”.
Y concluyó con
la idea de que el maestro y el educador deben saber mejorar las actitudes de
sus alumnos, y se sabe mejorar:
·
Con dedicación, con corazón, con pedagogía, con
esmero, con habilidad, con maestría, con destreza. Y siempre con cariño y con
ternura.
Cómo podemos
comprobar por estas palabras, el Papa, como buen Padre, está preocupado por los
graves problemas que afectan a sus hijos. Y en la actualidad, entre los niños y
entre los jóvenes, uno de esos graves y grandes problemas es el acoso escolar,
el ciberacoso, el bullyng. Tres nombres para una grave realidad que nos
preocupa, muy mucho, a todos. Nos preocupa por los nocivos efectos que produce
entre los más vulnerables de nuestra sociedad. Gracias Santo Padre por su
sintonía con la sociedad, con las familias y con los más desfavorecidos.
Publicada en DIARIO DE ÁVILA
Digital 8 de mayo de 2017
Publicado
en Diario de León. Digital 8 de mayo de 2017