47 En Andalucía, febrero ya huele a
Semana Santa
Para que reces y vivas con amor a través de la belleza y el arte de
Andalucía:
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Andalucía sabe mucho de amor.
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Andalucía vibra con su fe, descubre su
esperanza y comparte con amor.
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Andalucía sabe vivir intensamente cada
momento, con delicadeza y esmerada ternura.
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Andalucía es: bulla en la calle, ajetreo,
rincones inigualables, oración y sentimiento.
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Andalucía vive junto a María la sencillez
y la profundidad de la enseñanza del Hijo.
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Andalucía refresca cada año: la emoción de
vivos encuentros, la emoción de Jesús que sufriendo y por nosotros de
nuevo pasa.
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Andalucía huele: a azahar, a cera, a
lirio, a incienso; huele a dolor, pero todo, todo llevado gallardamente y con
mucho, mucho amor
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Andalucía no puede vivir sin Andalucía.
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Andalucía tiene el doctorado del saber
hacer y sin aspavientos, ni credenciales
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Andalucía es el lugar; ella y solo ella lo
sabe; sabe dónde y porque esta; sabe para que vive; y sabe con detallada
claridad: cuál es el horizonte que vivifica su esperanza
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Andalucía sabe, y sabe aun desde su
ignorancia; y sino: ven y comprueba. Y quizás, o sin quizás, si vienes:
quedaras preso de un algo, tan fuerte como inexplicable; quedaras preso de un
algo: tan cautivador como emotivo; de un algo tan sencillo, como cordial y
atractivo.
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Si vienes a Andalucía: no te irás, pues te
lo impedirá el libre muro de una vida distinta, no mejor ni peor, distinta,
pero tan distinta que, de ella y por ella, quedaras preso; quedaras preso o
presa de su peculiar y distinguido encanto.
Publicada en “Cartas al Director, Tu voz en la red” Digital 17 de febrero de 2014