28 Dios me interesa
No sé lo que tú, el que ahora lees esto, pensaras de Dios, de la
religión, de la fe, de la iglesia, de la misa, de las bodas por la iglesia, de
las primeras comuniones … No sé si Dios te interesa algo o no te interesa nada. Hoy el mundo va por
otros derroteros, en ocasiones derroteros peligrosos, pues ya se está viendo en
muchos casos como acaban. A mí al menos me parece que sin tener ideales firmes
es difícil vivir coherentemente pues
fácilmente nos podemos dejar llevar: por apetencias, por sensaciones,
por situaciones que pueden acabar en un pozo del que puede ser difícil salir.
Es necesario tener una razón para vivir, tener un fundamento para lo que
hacemos cada día, pues sino podemos acabar fácilmente desesperanzados, tristes
o angustiados sin saber por dónde dirigir nuestros pasos. Por eso es siempre
importante buscar con la mayor certeza posible el verdadero fin de nuestra vida,
y así los pasos que damos, el camino que recorremos será más llevadero y con
menos incertidumbre. No entiendo el interés de una gran mayoría de personas en
la actualidad de querer prescindir de Dios, hoy parece que se lleva ser:
agnóstico o ateo o no ser nada; eso parece que según la visión actual es lo más
coherente, pero no es así, pues: la fe, las creencias fortalecen nuestra
existencia, dan sentido a infinitud de incógnitas que tiene la vida, le dan un
porque a muchos de los sufrimientos y de las inquietudes que tenemos en el alma;
y sin embargo el no creer puede ser sinónimo de un existir sin sentido. ¿Para
qué vivo? ¿Para qué sufro? ¿Para qué me esfuerzo? ¿Qué fin tienen: mis
inquietudes, mis sentimientos? ¿Hay algo después de que ésta vida? ¿Tiene sentido la muerte? ¿Por qué los
jóvenes también mueren? ¿Por qué tanta desgracia? A veces esos interrogantes
nos llegan a la mente y no tenemos respuesta y sin embargo nuestra inteligencia
pide encarecidamente una respuesta coherente. A mi entender todos, directa o
indirectamente, buscamos un motor que dé sentido a nuestra vida; buscamos en un
ser la respuesta a nuestros interrogantes; buscamos un ser que pueda hacernos
felices en este mundo a veces tan caótico y desgraciado. Es muy posible que en muchas
ocasiones los cristianos no hayamos sido capaces de dar a conocer nuestro
mensaje de una forma atractiva, de tal manera que ese mensaje diera la
respuesta contundente que muchos necesitan para sus vidas, sin embargo: los
malos ejemplos, la doctrina mal explicada de muchos católicos, da lugar a que
los que no creen huyan de nosotros: a veces por nuestra falta de coherencia, y
otras veces por nuestra falta de ejemplaridad. Es triste que los que tenemos
que dar ejemplo produzcamos rechazo a los demás y que en nosotros no vean nada
más que seres: sin sal y sin luz, sin nada que a ellos le pueda ayudar en su
camino de búsqueda. Muchos por desgracia
se van aterrados a nuestro lado por el cristianismo egoísta que vivimos; en vez
de ser faros luminosos, somos tiniebla,
somos oscuridad; y esto es tremendo,
pero sucede en muchas ocasiones.
Jesucristo, en el evangelio, dice: “La mies es mucha pero los obreros
son pocos” yo diría que los obreros de la viña del Señor no sólo son pocos,
sino que además en vez de atraer: a la
fe, a la auténtica vida, lo que hacen, o lo que hacemos, es repeler por nuestra
actitud incoherente y poco comprometida. Muchos somos guías ciegos que guían a
otros ciegos; unos y otros ciegos: sin
luz y sin esperanza y sin capacidad de
transmitir y sin un fin concreto. Pidamos al Señor que los cristianos seamos
capaces: de cambiar, de modificar nuestras actitudes, de ser más generosos y
nos entreguemos de verdad a los demás, para de esta manera, entre otras cosas,
acercar el mundo a Dios; a ese nuestro Dios que por amor nos ha creado y nos ha
redimido; a ese Dios que siempre busca nuestra felicidad, aunque algunas veces
tenga que ser a través del camino de la contradicción.
Publicada
en “Cartas al Director, Tu voz en la red” Digital 22 de diciembre de 2013
Publicada en LA TRIBUNA DE
ALBACETE Digital 23 de diciembre de 2013
Publicada en DIARIO DE AVILA Digital 24
de diciembre de 2013