77   JAÉN: Bella silueta para el rostro de Dios 

En muchas ocasiones he tenido la oportunidad de hacer el recorrido Linares, Úbeda, Baeza, Jaén y Andújar; y he sentido la tentación de definir, de "dibujar" con breves pinceladas algo que nos sitúe en cada uno de estos lugares:
Para Linares es suficiente con profundizar en sus tierras  --en ahondar-- buscando bajo el suelo, lejos de la luz, ese metal, esa riqueza que ha hecho, que allí en el fondo, bajo su corteza, se encuentre la causa primordial de su orgullo: un orgullo genuino, singular, peculiarmente especifico. De allí, de aquellos tiempos en los que Linares tenía bien anclada su riqueza en el fondo de la tierra, surge esta ciudad de hoy. Ciudad industrial, bulliciosa, emprendedora, abiertas siempre al reto de un próspero mañana. Ciudad que es capaz de centrar la atención del mundo entero cuando la magnitud de los acontecimientos lo requieren.
¿Y Úbeda? ¿Qué decir de su arte?  : Es un arte emblemático lleno de peculiaridades que la distinguen, parece como si  --allí-- Dios se hubiera excedido volcando en ella su sobreabundante talento.
¿ Y de Baeza, que se puede escribir de ella?: Es una ciudad donde la sinfonía de la perfección es tan exquisita que siempre hay una maravilla nueva que descubrir: en cada  rincón, en cada lugar, en cada piedra, en cada esquina.......
Escudo de la provincia  Jaén
¿Y si miramos al cielo? ¿Qué podemos descubrir en él? No veis, en el cielo celeste y brillante de nuestra amada tierra, dibujado, casi esculpido, el rostro hermoso de un Dios que es el autor: de toda la riqueza, de toda la hermosura, de toda la belleza, de toda la sabiduría... No se ve en ese cielo mágico el emblema,  el escudo de  un  Rey Soberano, que por amor entrega su reinado al hombre.   Y, afín de cuentas: ¿No es ese el reino de Jaén? Un reino lleno de señorío y de grandeza, un reino en el que Dios reina y en el que su rostro, ese Santo Rostro ¡tan nuestro! Es con tanto orgullo custodiado; y en esa genial obra, en esa catedral, que tan llena esta de arte, como llena esta de Dios. 
¿Y que decir de Andújar?  Como  olvidar: Mi cuna, mi pasado, mi infancia, mi juventud. De allí viene la estirpe genealógica de mi gente, de mi sangre...
Y Andújar es –especialmente-- Andalucía y de ello se siente orgullosa. Del Guadalquivir recibe: la vida, una vida repleta de un natural encanto;  recibe el tesoro de una tradición; recibe la riqueza de una cultura. Al pasar por Andújar –en cierta manera, empezamos a descubrir el sello de identidad, el aire de distinción de los andaluces. Aquí el ser andaluz se palpa, el andalucismo se vive, la riqueza del costumbrismo y del tipismo se detesta   
Y como no mencionar, en ella, ese cerro, que es divino aposento de la Madre de Mi Señor: Jesús;  ese  Cabezo que  corona la magistral obra de una sierra que es, porque quiere serlo:
Morena... ¡Muy Morena! ¡Especialmente  Morena!
¡Esta es nuestra tierra!: la tierra de un Dios que con maestría, con sobreabundante maestría: crea, ¡Y esta es su obra!: Jaén y sus gentes, Jaén y su arte, Jaén y su encanto natural.


Publicado en Diario JAÉN  22 -  7 - 1998